Las fotografías pueden tener tantos detalles los cuales puede parecer que tienen vida propia, especialmente las fotografías de paisajes que de alguna forma confirman el adagio de que “una imagen dice más que mil palabras”. Si esto pasa con una imagen, podremos imaginar todo lo que pasa con las producciones audiovisuales donde interviene un equipo casi transdisciplinario para contar una historia.
Vivimos en un mundo en el que lo visual es lo dominante y restamos importancia a la existencia de los otros sentidos. A pesar de que realizo distintos tipos de fotografías, hago uso de las fotografías de modelos y fotografías de retrato para causar mayor interés.
Según el artículo de wikipedia titulado Una imagen vale más que mil palabras la frase se le atribuye al dramaturgo y poeta noruego Henrik Ibsen: «Mil palabras no dejan la misma impresión profunda que una sola acción». Después de su muerte en 1906, esta cita fue plagiada y parafraseada en lo que sabemos ahora. También se conoce la expresión china “Escuchar algo cientos de veces no es mejor que verla una vez” la cual se ha atribuido a Conficio.
A pesar de que trabajo con la fotografía y la realización audiovisual, no estoy de acuerdo del todo con la frase, ya que considero que la misma subestima los otros sentidos. Es bien sabido que la imagen comunica de forma rápida y es más fácil de hacer viral porque es sugerente. Tiene especial cualidad de inspirar, distinguir, posicionar, ubicar y disparar sensaciones. Los contenidos más virales son vídeos y nos atrae más una infografía que un texto porque desde que nacemos estamos viendo imágenes. Podemos beneficiarnos del uso de fotografías, ilustraciones, fotografías y videos para comunicarnos y expresar nuestras ideas. Sin embargo compramos cosas por su imagen y pude que se haga uso del poder de la imagen para manipularnos y controlarnos.
¿La vida perdería sentido si no podemos ver o perdemos la vista?
A pesar de que debe ser duro no contar con el preciado sentido de la vista, muchas personas que están en esa condición igual disfrutan de la belleza de la vida. Como personas debemos aprender a ver con todos los sentidos, aprende a “ver” de otra manera, dando mayor valor a la sutileza de los demás sentidos, como el poder del sonido, sentir lo que nos dice una caricia o a donde nos transporta un olor. El ver con los demás sentido nos hace libres y más creativos, conectándolos con el aquí y ahora.